Cada 31 de diciembre, las familias peruanas se preparan para despedir el año con alegría, esperanza y una buena dosis de superstición. Aunque muchas de estas costumbres tienen raíces europeas, en el Perú se mezclan con la creatividad y la fe popular de cada región, dando lugar a rituales llenos de simbolismo.
En este artículo te contamos las costumbres peruanas más curiosas para recibir el Año Nuevo, cómo se practican y qué significan para miles de hogares desde la costa hasta la selva.
Comer doce uvas para atraer la buena suerte
Una de las tradiciones más extendidas es la de comer doce uvas a medianoche, una por cada campanada y cada mes del nuevo año.
Se dice que quien logra hacerlo sin atragantarse tendrá prosperidad y salud. En el Perú, muchos incluso piden un deseo con cada uva, convirtiendo este momento en un pequeño ritual de esperanza colectiva.
En algunos hogares, las uvas se colocan previamente en una copa de vino espumante o en la mesa junto a las lentejas, símbolo de abundancia.
Usar ropa interior amarilla para atraer la suerte
En casi todas las ciudades del país, los mercados y ferias se llenan de ropa interior amarilla los últimos días de diciembre.
El color amarillo representa el oro y la energía positiva, por eso se cree que usarlo el 31 trae fortuna y alegría.
En provincias, muchas personas llevan esta prenda al revés y la voltean justo a medianoche, como señal de renovación y cambio.
También existen variaciones regionales: en algunos lugares de la sierra se prefiere el rojo, símbolo del amor y la pasión, sobre todo entre quienes buscan pareja en el nuevo año.
Pasear con una maleta vacía para atraer viajes
Si ves a alguien corriendo por la calle con una maleta justo después de las doce, no te sorprendas: es una de las cábalas más divertidas del Año Nuevo peruano.
Se cree que dar una vuelta a la manzana con una maleta vacía garantiza viajes y nuevas experiencias durante el año que comienza.
Algunos incluso colocan dentro un boleto simbólico o una prenda de playa, reforzando su deseo de conocer nuevos destinos.
Puedes complementar esta tradición con una lectura sobre destinos turísticos del Perú ideales para visitar en verano.
Lentejas para la prosperidad y el dinero
En todo el Perú, las lentejas son sinónimo de abundancia.
Muchas familias colocan un puñado en los bolsillos o preparan un plato especial con ellas para la cena del 31 de diciembre.
El origen de esta tradición viene de Italia, pero en el Perú se adaptó al estilo local: en algunos mercados limeños incluso se venden amuletos con lentejas doradas para colocar en la billetera.
Esta costumbre combina perfectamente con el inicio del nuevo año escolar o laboral, simbolizando prosperidad y estabilidad económica.
Barrer la casa para limpiar las malas energías
Otra costumbre que no puede faltar es barrer toda la casa antes o después de la medianoche.
En muchas regiones, se hace desde la puerta hacia la calle para “expulsar lo negativo y dejar espacio para lo bueno”.
Algunas familias complementan este acto con incienso o hierbas andinas como el romero y la ruda, que purifican el ambiente y traen armonía.
Este ritual tiene raíces andinas, donde se creía que el hogar debía empezar el año “limpio” en cuerpo, mente y espíritu.
Encender velas de colores para distintos deseos
Las velas de colores se han vuelto protagonistas en muchas celebraciones peruanas.
Cada color tiene un significado:
-
🕯️ Amarillo: dinero y éxito.
-
❤️ Rojo: amor y pasión.
-
💚 Verde: salud y bienestar.
-
💙 Celeste: paz y protección espiritual.
Al encenderlas, se pide un deseo mientras su llama representa la energía que guiará el nuevo ciclo.
En el norte del país, especialmente en Trujillo y Chiclayo, es común que se coloque un altar pequeño con velas y flores para agradecer por el año que termina.
Cruzar la medianoche con dinero en la mano
Una tradición sencilla pero muy popular es tener dinero en la mano o en el zapato cuando el reloj marca las doce.
El gesto simboliza la entrada del nuevo año con prosperidad.
Algunas personas guardan un billete doblado dentro del zapato derecho, mientras que otras prefieren colocar monedas bajo el mantel de la cena..
Dar el primer abrazo a quien más quieres
Aunque parezca un simple gesto, el primer abrazo del año también tiene su significado.
Se cree que la primera persona a quien abrazas marcará la energía de tu año: si es tu pareja, fortalecerás el amor; si es un amigo, tu círculo social; si es un familiar, la unión.
En muchas comunidades rurales, este momento se acompaña con música, bailes y un brindis con chicha o espumante local.
El muñeco del “año viejo”: quemar lo que ya no sirve
En varias regiones del Perú, especialmente en la costa norte y en la selva, se mantiene viva la tradición de quemar el muñeco del “año viejo”.
Estos muñecos, hechos de ropa usada y aserrín, simbolizan las penas, errores y malas experiencias del año que termina.
A medianoche se les prende fuego, a veces con fuegos artificiales o petardos, representando el inicio de un nuevo ciclo lleno de esperanza.